Antonio Cerdá, Consejero de Agricultura y Agua de la CARM ha presentado el segundo recurso contra la derogación del PHN que presenta esta comunidad autónoma, en tanto que el secretario general de Medio Ambiente,
Antonio Serrano, apuesta por que este recurso "no tiene ninguna posibilidad de triunfo".
Cerdá manifestó, tras presentar este recurso que la política hidráulica se "ha roto en dos partes, una controlada por la Comunidad Catalana y otra por el resto de CCAA", cuando "el río Ebro pasa por nueve comunidades y la constitución dice en su artículo 149 que hay que mantener el principio de unidad de cuenca". Cerdá reiteró que con la derogación "se vulnera la directiva marco europea".
En otro orden de cosas, Cerdá dijo que el motivo de la presencación de este segundo recurso por la CARM ha sido "recuperar el sentido de estado, el sentido de la solidaridad y el sentido común" ya que considera que en "este momento hay una política hidráulica errática" y así lograr "que las aguas sean públicas y por tanto de todos y que ningún gobierno autonómico se pueda apropiar de ellas".
Cerdá y Serrano mantuvieron una entrevista en relación con el tema, sobre la que el primero señaló que "no se está viendo cambio ninguno" en lo que respecta a la política del agua y que se les ha citado para algo "ligero y liviano". Este encuentro forma parte de los encuentros habituales entre ambas administraciones para tratar de limitar las asperezas surgidas tras la derogación del PHN por parte del Gobierno socialista, y Cerdá dijo al respecto que, en el Ministerio de Medio Ambiente se "está entreteniendo en directivas marcos" y que, aunque "todo eso está muy bien, a los problemas no se les está dando solución". Por su parte, Serrano manifestó que que lo importante eran "los resultados" y que el Ministerio había logrado que durante el verano no hubiera habido "restricciones significativas de abastecimiento" en los litorales mediterráneo y cantábrico de tal modo que el turismo no se ha visto afectado.
Por otro lado, el el diputado del PP por Murcia,
Alberto Garre, señaló el pasado día 16 que
«el deficiente funcionamiento de la desaladora de San Pedro del Pinatar difícilmente puede paliar el déficit hídrico de la cuenca del Segura y de la Región de Murcia». Garre subrayó que a pesar de que el Gobierno socialista prometió producir 25 hectómetros cúbicos con esa desaladora, la realidad es que sólo lleva producidos tres hectómetros». Al respecto, dijo que «evidentemente esos hectómetros contribuyen a paliar la sequía y para eso se incluyeron desaladoras como proyectos complementarios en el Plan Hidrológico Nacional que elaboró el Gobierno del PP, pero resulta evidente que
con esos ritmos de producción difícilmente se puede solucionar el problema de la falta de agua que tiene planteado la cuenca del Segura».
El pasado 16, Cerdá manifestó en relación con la
decisión adoptada por la Comisión Mixta de Seguimiento Talave-Cenajo de
reducir a la sexta parte la capacidad del túnel es un disparate técnico y un auténtico atropello a los intereses generales de la Cuenca del Segura. El consejero Cerdá entiende que el proyecto del túnel Talave-Cenajo, contemplado en el Plan Hidrológico Nacional,
cumple diversos objetivos, tales como la mejora de la calidad del agua de abastecimiento para consumo humano, la mejora de la regulación de la Cuenca del Segura y la defensa contra las avenidas.
Es un proyecto que forma parte de la planificación general de la cuenca –añade Cerdá- , por lo que considero disparatado que una comisión decida lo que hay que hacer, ignorando a los órganos de la propia cuenca”. Cerdá se pregunta “¿dónde está la participación, dónde está el talante, dónde está el Consejo del Agua de la Cuenca del Segura, dónde está la Junta de Gobierno de la Confederación Hidrográfica?” “¿Acaso el presidente de la Confederación no piensa decir nada ante semejante atropello?” ¿Acaso han opinado los regantes, los usuarios del agua de la cuenca, las comunidades autónomas afectadas...?.
En fin, a punto de finalizar el año hidrológico 2004-2005, la realidad es que apenas ha cambiado la situación. Pese a las lluvias ocurridas en la última semana, tan sólo ha sido un alivio para la agricultura equivalente a un riego extraordinario, ya que en general ha sido bien recibida entre los ambientes agrarios de la región murciana, en tanto que las raquiticas reservas (aproximadamente un 12% de su capacidad total) no han sido apenas afectadas con nuevas aportaciones de esas recientes lluvias.
Estadísticamente, en los próximos dos meses debería de incrementarse gradualmente las aportaciones de lluvias, y tal vez venga por ahí una posible recuperación moderada de los pantanos de cabecera del Segura y en concreto de los principales pantanos, Cenajo, Valdeinfierno, Puentes, Alfonso XII. Confiémos que la naturleza no siga siendo tacaña con Murcia y las posibles lluvias que puedan caer en estos dos meses, vengan más o menos con la generosidad que la última semana o los últimos 15 días y los acuíferos puedan recuperarse gradual y suficientemente.
